El hombre camina. Ignorando el espacio que hay entre durmiente y durmiente.
Muchos metros, a sus pies, discurre un río tranquilo y, en esa zona, algo profundo.
Sabe que quizas nunca vuelva a pasar un tren.
El tiene lleva a cuestas su propio medio de transporte. Liviano.
No contaminante. Le mantiene en buen estado físico.
El hombre está tranquilo. Tiene el tiempo de provincias. Todo el tiempo del mundo.
1 comments:
As a city cyclist and a train spotter, I find this one fascinating. I wonder where the man is going: but I feel that it's not the right state of mind to approach this picture.
ps: where did you take it?
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