Caminando a campo traviesa cerca de la playa me encontré con esta escena: La gata Alfonsina lista para dar el último zarpazo a un pequeño roedor. Este, presintiendo lo que viene se entrega indefenso a su suerte.
Tomo la fotografía y me alejo con tristeza. La minúscula víctima ya estaba herida y no había nada más que hacer...
0 comments:
Publicar un comentario