La fantasía de inventar y usar un aparato con el que se pueda ver a la gente sin ropa fue motivo de multitud de comedias en los últimos treinta años donde parecía que cualquier cosa era posible. Y en efecto, el aparato se hizo realidad en la década pasada con las cámaras de "ondas milimétricas", artefactos que en su versión hogareña le causaron un gran dolor de cabeza y de bolsillo a Sony.
Ahora la idea vuelve como parte de un proyecto muy serio: el programa científico Star Tigre avalado por el gobierno británico. La Unión Europea tiene lista la tecnología para producir cámaras y equipos que puedan "ver" a través de papel (contenido de sobres), ventanas, mampostería, ropa y hasta paredes, pero en este caso el sistema se basa en la utilización de ondas de altísima frecuencia que se encuentran en el orden de los Terahetz por lo que se les dio el nombre vulgar de "Rayos T" (T-Rays)
Esa tecnología de rayos T es más reveladora y precisa que la mencionada de "ondas milimétricas" y sus implicancias pueden cubrir diferentes áreas: seguridad, medicina e investigación espacial son las principales.
Es en los aeropuertos y lugares de alto riesgo, esta tecnología se puede utilizar para detectar armas o explosivos escondidos dentro de la vestimenta o equipaje de una forma más certera que los métodos actuales por rayos infrarrojos que se basan en la temperatura.
A pesar de la obsesión por la seguridad que campea en el primer mundo tras los atentados de año pasado, el primer gran desafío de estos Rayos T será más allá de la tierra, en el estudio de la atmósfera ya que pueden traspasar nubes, humo, niebla, vapor, etc. Y así observar y cuantificar fenómenos (como la temperatura superficial de los océanos) de una forma más acabada que las técnicas actuales. El estudio de los cometas es otro de los trabajos que le espera a estos rayos.
Pero tal vez el paso más interesante (aunque el más lejano en el tiempo) se dé en el terreno de la medicina. En un futuro, cámaras equipadas con esta tecnología podrán detectar tumores cancerígenos debajo de la piel, entre otras enfermedades.
Las ondas milimétricas, que mencionamos al principio, son una versión de baja frecuencia de rayos T y se comportan de manera más parecida a las ondas de radio. En cambio las ondas de Terahertz se posicionan dentro del espectro de frecuencia en un lugar indefinido entre las ondas de radio y las de luz, por lo que también se las llama señales cuasi-ópticas.
La cámara, llamada T5000, se basa en la tecnología de la imagen, que sirve para identificar objetos por los rayos electromagnéticos naturales o rayos T. A pesar de poder visionar todo tipo de objetos ocultos bajo la ropa la cámara no recoge detalles físicos del sujeto.
Funciona sobre la base de que todas las personas y los objetos emiten bajos niveles de radiación electromagnética. Dependiendo de la tela o el material, la señal de la onda es diferente, de manera que, por ejemplo, los explosivos se pueden distinguir de un bloque de arcilla e incluso la cocaína se puede detectar en una bolsa de harina a simple vista.
La tecnología, que tiene aplicaciones civiles y militares podría ser utilizada en aeropuertos, centros comerciales o eventos deportivos.
Funciona sobre la base de que todas las personas y los objetos emiten bajos niveles de radiación electromagnética. Dependiendo de la tela o el material, la señal de la onda es diferente, de manera que, por ejemplo, los explosivos se pueden distinguir de un bloque de arcilla e incluso la cocaína se puede detectar en una bolsa de harina a simple vista.
La tecnología, que tiene aplicaciones civiles y militares podría ser utilizada en aeropuertos, centros comerciales o eventos deportivos.
"Los actos de terrorismo han sacudido el mundo en los últimos años y las precauciones de seguridad se han hecho más estrictas a nivel mundial", asegura un ejecutivo de ThruVision, quien cree que "la capacidad de ver tanto objetos metálicos como no metálicos a 25 metros de distancia es sin duda un factor clave que mejorará la capacidad de cualquier sistema de seguridad".
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